Sobre el techo está mi gato.
No usa botas,
ni zapatos.
Tres yardas tiene de rabo.
No es de cuento,
ni de trapo.
No está gordo, ni está flaco.
Y de raza, es puro sato.
Toma su leche en el plato.
Hace purrrr, a cada rato.
Señores, así es mi gato.
Le he pintado su retrato.
domingo, 7 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)